¿Odias la oficina? ¡Quizás es la luz! Parte 1

13 agosto, 2018

La oficina es ese espacio en donde realizamos nuestras labores profesionales, el lugar en donde pasamos en promedio 8 horas de 5 a 6 días a la semana… o incluso más si eres workaholic o tienes una descomunal cantidad de pendientes y responsabilidades. Entonces ¿no crees que es importante que tu oficina sea un lugar cómodo y agradable? Y no sólo hablamos acerca del ambiente entre compañeros, sino del espacio físico, un lugar cómodo para laborar de forma adecuada.

¿Y si te contamos que cambiando pequeños detalles de un sólo elemento en tu oficina puedes obtener una mejora en el estado de ánimo y hasta un aumento del 16% en la productividad? ¡Así es! Solamente con cambiar la luz puedes lograrlo. Y es que la forma en la que la luz impacta el cuerpo humano es impresionante; ella nos ayuda a mantener nuestro reloj biológico, patrones de sueño, estados de ánimo y niveles de energía.Trabajar con una luz inadecuada no sólo origina fatiga ocular y un daño paulatino en nuestra vista, sino que además provoca que nos cansemos más rápido, nos duela la cabeza con mayor facilidad, aumenten nuestros niveles de estrés y nuestra espalda sufra por malas posturas.

En cambio, hacer nuestras labores bajo los efectos de una luz adecuada nos ayudará en la atención, vitalidad, energía y salud mental. Pero antes de comenzar a corregir la iluminación de nuestro lugar de trabajo, hay que tener claro que un espacio con mucha luz no es igual a un ambiente bien iluminado, el tipo de iluminación siempre depende de las actividades que se van a realizar en él. El confort visual radica en el equilibrio de la cantidad, calidad, estabilidad, orientación y temperatura de la luz.

¿Luz y sombra?

¿Falta de luz o exceso de ella? Estos son los dos principales problemas de iluminación en las oficinas, a continuación veamos en qué consiste cada una.

Falta de luz

Ésta tal vez sea la más sencilla de ambos, si realizas una tarea que requiere fijar la vista y tu iluminación es muy tenue o está alejada de ti, lo más probable es que necesites más luz y la forma de resolverlo es agregando una fuente nueva de iluminación. Esta depende del diseño de tu espacio: puede ser desde una lámpara de mesa, una de pie o incluso puedes agregar lámparas colgantes que estén cerca de tu área de trabajo. Ahora bien, si la fuente de iluminación está cerca pero tienes que esforzarte para ver con claridad, te sugerimos que hagas un cambio en la temperatura y en la intensidad de la luz; al seleccionar una temperatura cercana a los 6,000K (Kelvin) te ayudará no sólo a ver con más claridad sino también a percibir con mejor detalle lo que estás haciendo. Este tipo de iluminación es perfecta para trabajo de escritorio muy minucioso o hecho a mano.

El deslumbramiento

El deslumbramiento es la sensación del exceso de luz en un espacio,que se distingue por la molestia y/o reducción de la vista para percibir los objetos, debido a su inadecuada distribución y/o aumento repentino durante un tiempo determinado. El deslumbramiento actúa sobre la retina, la cual produce una reacción fotoquímica volviéndose insensible durante cierto tiempo, una vez transcurrido este periodo vuelve a la normalidad. Se produce de forma muy sencilla: cuando hay una fuente de luz, artificial o natural, que se encuentra situada dentro del campo visual o es reflejada por superficies altamente reflejantes. Un claro ejemplo de un deslumbramiento es recibir las luces de un carro directamente en los ojos y no ver claramente por unos segundos después.

Existen dos tipos de deslumbramientos: el psicológico (molesto) que consiste en una sensación incómoda provocada porque la luz que llega a nuestros ojos es demasiado intensa produciendo así fatiga visual y el fisiológico (perturbador) que consiste en un velo luminoso que provoca una visión borrosa, sin nitidez y con poco contraste que desaparece al esfumarse la fuente de luz intensa.

Ahora veamos cuáles son las características de los deslumbramientos provocados por las fuentes de iluminación:

Mientras más intensa es la fuente de luz, mayor es el deslumbramiento.
El deslumbramiento es mayor si la fuente de luz forma un ángulo de 30° o menos con relación a la visión del sujeto respecto a la vertical.

Mientras más lejos se encuentre la fuente de luz de la línea de la visión, menor será el deslumbramiento, este también disminuye al estar por encima del ángulo de la visión.
Mientras mayor sea el contraste entre la intensidad de la fuente de luz y sus alrededores, mayor será el deslumbramiento.
Una fuente de luz de baja intensidad también puede producir deslumbramiento si el tiempo de exposición es largo.

Recordemos que el origen del deslumbramiento puede ser una fuente de luz natural o artificial, o una superficie reflejante. Las superficies brillantes o que no son completamente mates dan lugar a focos luminosos y aunque no sean muy intensos pueden ser molestos, principalmente cuando su reflejo se encuentra en la región central del campo visual. Nuestra recomendación es evitar lo más posible cualquier superficie reflejante, pulida o luminosa que no sea necesaria dentro del área de trabajo; por ejemplo: cristales, mesas, superficies enceradas, semi pulidas, etcétera que pueden ser iluminadas con la más mínima fuente de luz.

¿Cómo no iluminar tu área de trabajo?

Ahora, vamos a mostrarte unos ejemplos de mala iluminación sobre escritorios o mesas de trabajo y analicemos el por qué.

En la primera imagen vemos cómo la fuente de iluminación se dirige a todas direcciones y entra directamente en el campo de visión del sujeto, lo cual crea un deslumbramiento molesto. En la segunda imagen hay dos problemas: primero, la fuente de luz está posicionada detrás del sujeto por lo que este mismo crea una sombra sobre su área de trabajo que le impide ver exactamente qué es lo que está haciendo; segundo, la dirección de los rayos de la fuente de iluminación se dirige hacia la pantalla, los cuales se reflejarán en el área de visión; por lo que el sujeto tendrá deslumbramiento molesto. En la tercera el reflejo de la fuente de luz llega directamente a su pantalla, creando deslumbramiento de molesto a perturbador dependiendo de la intensidad de la fuente de iluminación.

¿Reconoces alguna de estas posiciones en las lámparas de tu oficina? Si es así sigue al pendiente de la Parte II de esta entrada y descubre las mejores soluciones y tips de iluminación para mejorar la visión de tus áreas de trabajo. Cuéntanos si conoces algún otro tipo de problemas de iluminación en oficinas, así como si te interesa saber más acerca de la iluminación de otros ambientes.