Cómo adecuar una oficina casera en el sótano

2014/06/06

sotano

Cada vez es más común trabajar profesionalmente de manera autónoma; los freelancers generalmente no tienen un horario, un jefe con quien lidiar todo el día… ni una oficina.

Si éste es tu caso y dispones de un sótano (o al menos de un cuarto de servicio sin uso en tu casa o tu edificio), ¿qué te parecería cambiar las cafeterías, el comedor, aquel rinconcito bajo la escalera o tu recámara por una práctica y funcional oficina en casa?

Incluye en tu proyecto estas 4 recomendaciones:

Adecuación

Ya que en una oficina necesitas silencio para concentrarte y una completa conectividad para los aparatos electrónicos, debes aislar la habitación contra los ruidos (alfombrar el espacio puede ser un apoyo) y hacer instalaciones para conectar el teléfono, las computadoras y los demás dispositivos. Si el sitio está muy encerrado, piensa en instalar un minisplit para que tengas un clima agradable.

Buena iluminación

Generalmente los sótanos o cuartos de servicio son oscuros por carecer de suficientes entradas de luz. Como son lugares pequeños, no será difícil hacer que brille de manera adecuada. Es mejor colocar en el techo plafones o empotrados que lámparas colgantes o aplicaciones de pared: así dejarás todo el espacio visualmente limpio y despejado, más si tomamos en cuenta que en general estos sitios tienen baja altura. Prefiere el uso de LED, que ilumina sin calentar.

Muebles que se adapten

Busca mobiliario modular para oficina que se ajuste tanto a tu actividad como al tamaño y el tipo del espacio donde te vas a instalar: necesitas aprovechar cada centímetro. No escatimes en una buena silla cómoda, funcional y ergonómica, pues pasarás mucho tiempo en ella. Procura que las paredes sean de colores claros y lisos para que den sensación de amplitud.

Ten todo a la mano

Debes separar lo que es casa de lo que es área de trabajo, para que no pierdas concentración ni eficiencia. Es buena idea que te pongas horarios por cada tarea que pretendas realizar en el día. Para que no estés transitando entre ambos espacios, ten en tu nueva oficina tus libros de consulta, útiles de repuesto y cualquier material que pudieras necesitar para tus labores, incluidos una cafetera, agua, galletas y lo que sea que te haga sentir cómodo.

¿Te gustaría trabajar desde casa? ¡Ya tienes ideas para el comienzo!