Consejos para iluminar recibidores, escaleras y pasillos.
La iluminación de estas áreas puede ir desde lo funcional hasta lo decorativo, lo que es importante tomar en cuenta es que debe ser una fuente de luz clara y sin sombras, pues son zonas con una alta afluencia de personas.
En el recibidor: la luz debe ser general y cálida, pero sobre todo debe evitar las sombras. Este es el primer lugar que perciben las personas al llegar al hogar por lo que también es importante no utilizar tonos fríos. La cantidad de luz dependerá del tamaño del recibidor, si es grande se puede colocar varios apliques en las paredes o una lámpara de techo que proporcione luz general.
En escaleras: la clave es contar con un interruptor tanto subiendo las escaleras como abajo. Es preferente iluminar esta zona desde arriba a través de un solo foco que otorgue buena iluminación o si se cuenta con un espacio amplio, se puede utilizar iluminación decorativa con varias lámparas colgantes colocadas en diferentes alturas. Una tendencia reciente es iluminar desde abajo, proporcionando luz en cada escalón, si lo utilizas te recomendamos complementar también con luz descendente.
En pasillos: se requiere una luz pareja ya que es el espacio que guía hacia otras zonas del hogar. Es recomendable utilizar una línea perimetral que puede ser tanto en el techo como en el suelo, también se puede crear ritmo utilizando el mismo tipo de lámparas en un patrón repetitivo.
Estos son tres puntos del hogar que suelen ser pasados por alto, pues no son zonas donde se suela pasar mucho tiempo, aun así, son áreas de gran importancia ya que su iluminación también aporta carácter a los hogares.