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3 ideas para decorar tu muro de acento
Sin duda, el lugar de la casa que uno siente más propio es la recámara. Si cambias de ropa, zapatos e imagen personal, ¿por qué no también actualizar tu espacio privado? Una manera fácil de lograrlo, pero con resultados espectaculares, es la creación de un muro de acento.
¿Qué es esto? Es elegir una de las paredes de tu habitación para experimentar con un nuevo color, textura o realce. Puedes convertir en muro de acento aquel donde está la cama, uno donde quieras mostrar tus fotos u obras de arte, o también puede ser el que esté rodeando alguna ventana. Tómate la libertad que quieras, al fin y al cabo la recámara es un área de la casa sobre la que tu estética puede mandar sin límites.
Aquí tienes algunas ideas para que elijas la que más vaya a tono con la atmósfera y el estado de ánimo que quieras proyectar.
Tapízalo
Para el muro de cabecera, nada como utilizar papel tapiz, ya que sus figuras se convertirán en una especie de marco para la cama. Pueden ser geométricas, orgánicas o contemporáneas. Con la iluminación general de la recámara y el apoyo de lámparas instaladas a los lados de la cabecera bastará para completar el «cuadro». Elige el tapiz de acuerdo con tu estilo de decoración y anímate.
Píntale formas
Crea o inspírate en un diseño, texto o plantilla existente, y manda pintar uno de los muros en un color especial sobre el cual plasmar los gráficos de tu preferencia. También puedes poner aplicaciones de vinil o, si es el cuarto de los niños, dejarlo en blanco para que tus hijos creen su propio mural con pinturas o crayolas. ¿Así o más personalizado? No olvides acentuar el diseño con luminarios tipo spot dirigidos a la pared.
Dale profundidad
Otra opción, si cuentas con un cuarto amplio, es aplicar un color oscuro en uno de sus muros. Crearás un efecto profundo, dramático y muy contemporáneo. Esto también funciona en un cuarto alargado, siempre y cuando pintes la pared del fondo y no una de las largas. Sobre ella puedes colocar tus objetos más preciados.
La iluminación en este tipo de muros es quizá la más importante de todas, ya que si tratas de destacar alguna pieza específica, necesita lucir con todo su esplendor. Además, al tratarse de una pared en un tono oscuro, la luz debe darle dimensión.
Te recomendamos luminarios de ángulo cerrado para que el área en especial que deseas iluminar obtenga intención. Puedes instalar luminarios dirigibles empotrados a una distancia corta respecto al muro, de entre 20 y 40 centímetros. Otra opción que queda muy bien son los luminarios tipo canope, que tienen tres spots para que los dirijas adonde desees.
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